10 de Febrero 2022
Los hombres me producen cierta ansiedad, me paraliza el miedo cuando veo que no siempre son consientes de lo que esta bien o es correcto, por que algunas veces tengo que salir corriendo cuando su rencor aparece ó tengo que hacer cosas poco favorables para mí, buscar una solución a favor de la equidad.
Cuando algo esta mal el error te persigue hasta sus últimas consecuencias, el dolor, la intolerancia, la inestabilidad aparecen y encuentras el mismo error en cada persona. Una mueca de incertidumbre al paso del tiempo.
Entre otras cosas la promesa del por venir me ata a una idea hasta ahora poco probable, es decir por el momento no me encuentro embarazada, pero, dicho deseo me limita mucho, no por mi misma sino por los demás (como un recordatorio de lo que debo hacer)
Tengo mucha calma y paciencia, siempre tengo ganas de seguir y aunque la idea de salir adelante diariamente me produce malestar cuando lo veo reflejado en otras personas "lo sigo haciendo". Hoy no es un buen día para mí, por ejemplo.
No tengo una vida dedicada a la contemplación, más bien dedicada a la realización de muchas tareas y a la escucha y convivencia con otras personas, todas las mañanas me levanto a solucionar mi vida y ayudar a otras personas.
Es horrible quedarse en la calle, es horrible un mundo con envidia, es horrible sentir el odio de la persona que amas, tener que esconderse y que no te abran la puerta. Está mal que jueguen con tu tiempo y "que te pierdan la confianza"
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